Durante todo ese lapso de tiempo Venezuela ha permanecido dentro de un
sistema democrático de gobierno en el que, la política exterior ha buscado
obtener para el país condiciones idóneas para su desenvolvimiento y desarrollo
en el marco de las relaciones internacionales con diversas Naciones del mundo.
Venezuela, como toda Nación independiente, hace vida en distintas
organizaciones internacionales, en el ámbito regional, continental y mundial,
así como también en varios organismos internacionales especializados,
desarrollando de este modo las orientaciones generales de su política exterior.
Venezuela se ha caracterizado durante toda su vida democrática por pertenecer a
los organismos y organizaciones internacionales que se han ido creando en el
mundo desde mediados del siglo XX, como fórmula para alcanzar el desarrollo
social y económico de los naciones, para promover y mantener la paz y tratar de
crear un mundo más justo.
Características generales de la política Exterior de Venezuela desde 1958 hasta la Actualidad
A partir de un análisis comparativo de la política exterior de los gobiernos
democráticos que han regido los destinos de la Nación luego del 23 de Enero de
1958, es posible extraer algunas características y líneas de acción con
continuidad en el tiempo. Entre dicha características se pueden destacar:
- El desenvolvimiento de Venezuela en la escena internacional ha estado fuertemente determinado por la condición de ser una Nación productora de Petróleo; la necesidad de obtener beneficios económicos con la actividad petrolera ha llevado a Venezuela a participar en organismos como la OPEP , así como a establecer relaciones económicas especiales con algunos países.
- Durante todo el Período democrático Venezuela ha hecho vida activa dentro de diversos organismos internacionales, como la ONU, OEA, Grupo Andino, SELA, CEPAL, entre otros. En todos ellos Venezuela ha promovido siempre la defensa de los valores democráticos y el respeto a la autodeterminación de los pueblos.
- La integración Latinoamericana ha constituido uno de los objetivos centrales de la política exterior venezolana; de hecho, tanto en la constitución de 1961 como en la de 1999, se contempla dicha integración como un objetivo prioritario del estado venezolano.
- La relación de Venezuela con los Estados Unidos ha sido una de las preocupaciones fundamentales en la política exterior desde el Gobierno de Betancourt y hasta el día de hoy. Este país es el primer socio comercial de Venezuela, punto de origen de casi todas las importaciones y principal destino de los productos comerciales venezolanos.
- En todo momento Venezuela ha mantenido una postura pacífica ante la comunidad internacional, sin verse envuelta nunca en conflictos armados internacionales. En ese sentido vale la pena mencionar que Venezuela ha participado en distintas partes de América en misiones de Paz y de Ayuda Humanitaria, en casos de Guerras ó desastres naturales.
Venezuela ha ratificado la inmensa mayoría de los tratados y
convenios internacionales en materia ambiental, de desarme y no
proliferación de Armas, de ayuda y cooperación económica, así como en materia
de derechos Humanos y respeto a la propiedad.
La Evolución de la Política Exterior Venezolana
1958-2004
A
continuación se realizará una revisión de las principales características y
lineamientos de la política exterior de los gobiernos de la historia
democrática venezolana, destacando en cada caso los principales acontecimientos
internacionales en los que Venezuela ha jugado un papel activo.
La política Exterior de los Gobiernos de Rómulo Betancourt y Raúl Leoni (1959-1969)
Al iniciarse un nuevo período en la Historia nacional con el establecimiento de la Democracia, la política exterior venezolana se orientó a mantener relaciones de mutuo respeto con la mayor parte de los países del mundo, así como asegurar la colaboración del país en todos los esfuerzos para consolidar la paz y la democracia en el mundo y a participar vivamente en todos los proyectos encauzados a la defensa de los derechos humanos. Tales principios fueron señalados en el preámbulo de la Constitución promulgada en 1961.
La política Exterior de los Gobiernos de Rómulo Betancourt y Raúl Leoni (1959-1969)
Al iniciarse un nuevo período en la Historia nacional con el establecimiento de la Democracia, la política exterior venezolana se orientó a mantener relaciones de mutuo respeto con la mayor parte de los países del mundo, así como asegurar la colaboración del país en todos los esfuerzos para consolidar la paz y la democracia en el mundo y a participar vivamente en todos los proyectos encauzados a la defensa de los derechos humanos. Tales principios fueron señalados en el preámbulo de la Constitución promulgada en 1961.
Sin embargo, en los primeros años de la década de 1960, la
implementación de la llamada Doctrina Betancourt que implicaba el
reconocimiento por parte de Venezuela sólo a regímenes legitimados por
elecciones democráticas causó la ruptura de relaciones diplomáticas con un gran
número de países, particularmente en el continente americano, lo cual llevó a
un relativo aislamiento de Venezuela en el contexto de su política exterior.
Especial tensión existió en ese período en las relaciones entre Venezuela y Cuba, así como en las relaciones con
el régimen dictatorial que en esos años gobernaba República Dominicana.
Otro hecho de gran importancia lo constituyó la actuación protagónica de
Venezuela en la fundación de la OPEP, ocurrida en 1960. Dicha actuación se
correspondió con el desarrollo de una política exterior en materia económica
bien definida, que buscaba la defensa de los interese petroleros venezolanos en
el contexto mundial.
Durante el Gobierno de Raúl Leoni (1964-1969), la ya referida doctrina
Betancourt permaneció vigente, aunque se observó mayor flexibilidad en su
aplicación; como consecuencia del agravamiento de las tensiones con los
sectores de izquierda a nivel nacional e internacional, el Gobierno de Leoni
interrumpió las relaciones de Venezuela con la Unión soviética, relaciones que
databan de 1945.
La Política Exterior del primer Gobierno de Rafael Caldera (1969-1974)
Con el gobierno del Presidente Rafael Caldera, se estableció un criterio más
amplio y realista de pluralismo ideológico, que permitió darle un nuevo impulsó
a las relaciones exteriores del país. El nuevo principio rector de la política
internacional practicada durante dicho gobierno estuvo orientado básicamente al
mejoramiento de las relaciones Norte-Sur, a la vez que se fundamentó en los
postulados teóricos del desarrollo de la humanidad, que suponía la redefinición
de la economía mundial sobre criterios de mayor justicia y equidad.
Se basó además la política exterior calderista en la promoción de la
unidad latinoamericana y el nacionalismo democrático, promulgando a la vez la
defensa de la soberanía sobre los recursos naturales de las naciones del Tercer
Mundo, para asegurar que el producto de su explotación fuese destinado a su
propio desarrollo.
Una vez
consolidada la plataforma democrática en lo interno, el gobierno se propuso
ampliar los nexos con el exterior, tratando de revertir los efectos causados
por la política exterior de Betancourt. Se establecieron entonces relaciones
diplomáticas con países de las más variadas inclinaciones ideológicas, entre
los que destacan la República Popular de Hungría (1969), la República
Democrática y Popular de Argelia (1971), Australia
(31.5.1973); también se reanudaron con países como Perú (1969), Argentina
(1969), la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas
(1970).
La política exterior de Caldera se centró también en la búsqueda de una
solución a la controversia limítrofe mantenida con las Repúblicas de Colombia y
Guyana, por lo que se optó por continuar las negociaciones sobre la
delimitación de áreas marinas y submarinas con Colombia y diferir las
discusiones con Guyana durante un lapso de 12 años, mediante la firma del
llamado “Protocolo de Puerto España”
firmado en 1970 tras el vencimiento del “Acuerdo de Ginebra” de 1966.
La Política Exterior del primer gobierno de Carlos Andrés Pérez (1974-1979)
En marzo de 1974, Carlos Andrés Pérez asumió la presidencia de la República bajo condiciones internas que dieron a las relaciones exteriores de Venezuela un nuevo rumbo. En general se trató de una actitud de ampliación de las iniciativas adelantadas durante el período de gobierno de Caldera. Esta actitud obedeció primordialmente a hechos de carácter económico entre los que destaca el estallido de la guerra árabe-israelí de 1973, pues dicho conflicto provocó un inesperado aumento en los precios del petróleo. Este acontecimiento fue complementado más tarde en Venezuela con la nacionalización petrolera en 1974.
La Política Exterior del primer gobierno de Carlos Andrés Pérez (1974-1979)
En marzo de 1974, Carlos Andrés Pérez asumió la presidencia de la República bajo condiciones internas que dieron a las relaciones exteriores de Venezuela un nuevo rumbo. En general se trató de una actitud de ampliación de las iniciativas adelantadas durante el período de gobierno de Caldera. Esta actitud obedeció primordialmente a hechos de carácter económico entre los que destaca el estallido de la guerra árabe-israelí de 1973, pues dicho conflicto provocó un inesperado aumento en los precios del petróleo. Este acontecimiento fue complementado más tarde en Venezuela con la nacionalización petrolera en 1974.
Desde el
punto de vista institucional se fortalecieron las relaciones con los países
miembros de la OPEP y se declaró abiertamente la importancia de la riqueza
petrolera como herramienta para establecer un nuevo orden económico
internacional que permitiera el desarrollo de las naciones del Tercer Mundo
. La extensión de la política pluralista iniciada por Rafael Caldera se expresó
en el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba en 1974. Como nota
negativa se destacó un incidente diplomático que causó la suspensión de
relaciones con Uruguay en 1976.
El diálogo Norte-Sur propuesto también por Caldera fue parcialmente sustituido por el entendimiento Sur-Sur. Con este fin, el presidente Pérez visitó gran número de países, entre los que se encuentran: Perú (1974), Colombia (1975, 1977 y 1978), México (1975), Panamá (1975 y1978), Argelia (1975), República Dominicana (1976 y 1977), Brasil (1977), Reino de Arabia Saudita (1977), Irak (1977) Irán. Visitó además España (1976), la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (1976), Italia (1976), Gran Bretaña (1976) y la Santa Sede, siendo el primer mandatario venezolano que lo hizo (1976).
La Política Exterior del Gobierno de Luis herrera Campins (1979-1984)
En 1979 llegó a la presidencia Luis Herrera Campins inaugurándose otra etapa en la política exterior venezolana. A la base doctrinal fundada por Rafael Caldera se adicionó un nuevo principio: el de la institucionalización de la libertad y la democracia. Esta orientación significó un paso decisivo del gobierno para promocionar el ascenso al poder de gobiernos demócrata-cristianos en el área de Centroamérica y el Caribe. Esta política, apoyada inicialmente porEstados Unidos, se abandonó tras la derrota de José Napoleón Duarte y el triunfo de un sector ultraderechista en El Salvador.
Un cambio circunstancial de orientación fue evidente durante la guerra
de las Malvinas, en 1982, cuando Venezuela ofreció su apoyo absoluto a la
dictadura militar que gobernaba para ese momento en Argentina. Respecto a la
política de fronteras, el gobierno se vio en la obligación de sortear el
problema de la delimitación marítima con Colombia, y la reclamación del
Esequibo. Sobre lo primero, se logró en octubre de 1980 un proyecto de acuerdo,
conocido como “Hipótesis de Caraballeda” el cual
fue rechazado por considerarse que lesionaba la integridad territorial del país
en el área del golfo de Venezuela. En cuanto a la reclamación del Esequibo, se
decidió no prorrogar el Protocolo de Puerto España. En el plano diplomático,
Herrera Campins visitó Costa Rica (1980), Honduras
(1980 y 1982), México (1981), Nicaragua (1980 y 1982), Colombia
(1983) y la República Federativa de Yugoslavia (1983).
La Política Exterior del Gobierno de Jaime Lusinchi (1984-1989)
La grave crisis económica originada en 1983 como consecuencia de la caída de
los precios del petróleo, unida a una fuerte devaluación del Bolívar en
relación al Dólar, llevó al gobierno de Jaime Lusinchi a dejar en segundo plano
el desarrollo de una política exterior estructural, por lo que la desarrollada
fue coyuntural. Aun cuando se preservaron los principios básicos de la diplomacia
desarrollada en la década de 1970, reivindicados por la Cancillería de Herrera
Campins en la segunda mitad de su administración, la política exterior no
mantuvo la misma profundidad, debido a las dificultades económicas ya
señaladas.
Se intensificaron los viajes de las misiones económicas que buscaban un
acuerdo de refinanciamiento de la deuda con la banca acreedora internacional.
Las relaciones con Uruguay se reanudaron en 1985. Las relaciones con Colombia
alcanzaron un punto crítico en agosto de l987, a raíz del incidente causado por
la corbeta OARC Caldas al penetrar en aguas del golfo de Venezuela. Jaime
Lusinchi visitó distintos países como Colombia (1986), Trinidad y Tobago
(1986), España (1986), Portugal (1986), México (1987), Guyana (1987) y Brasil
(1988).
La política Exterior de Venezuela de 1989 a 1999
La política Exterior de Venezuela de 1989 a 1999
Carlos Andrés Pérez asumió nuevamente la presidencia del país en 1989, reorientando la política exterior venezolana de acuerdo con el nuevo orden político mundial establecido tras el final de la Guerra Fría. Casi desde el inicio de su gestión, Pérez emprendió una serie de visitas oficiales a distintos países, como Estados Unidos, Hungría , Bolivia, Argentina, Uruguay, Costa Rica, Colombia , Chile, Brasil, España , Francia , la República Federal de Alemania. Pese a este enorme esfuerzo diplomático, la política exterior de Pérez no pudo desarrollar los lineamientos planeados, que consistían en un nuevo enfoque de la integración latinoamericana, el fortalecimiento de la diplomacia comercial, la cooperación Sur-Sur, y el diálogo Norte-Sur.
Los desórdenes públicos de febrero de 1989, y los intentos de golpe
militar de febrero y noviembre de 1992, motivaron en 1993 la destitución de
Carlos Andrés Pérez y el ascenso a la Presidencia de la República de Ramón J.
Velásquez, a quien correspondió la difícil tarea de dar marcha al proceso de
recuperación de la confianza internacional en las instituciones venezolanas.
Durante el lapso comprendido entre 1989 y 1993 fueron reconocidas las ex
repúblicas que conformaban la U.R.S.S.
(Estonia, Letonia, Lituania, la Federación de Rusia, y la Comunidad de
Estados Independientes), así como las nuevas repúblicas de Croacia, Eslovenia,
Bosnia-Herzegovina, República Checa, República Eslovaca, y se establecieron
relaciones diplomáticas con la República Socialista de Vietnam (1989), Namibia
(1990), Eslovenia (1991), así como con las ya mencionadas ex repúblicas
socialistas.
El segundo período de Gobierno de Caldera (1994 - 1999) estuvo marcado
por la existencia de una difícil situación económica y social donde los
esfuerzos diplomáticos se concentraron en la consecución de acuerdos con
distintos organismos económicos internacionales, en especial con el Fondo
Monetario Internacional y con el Banco Mundial. En materia ideológica, la
política exterior del segundo gobierno de Caldera promovió el establecimiento
de un nuevo orden internacional multipolar, así como en la constitución de un
espacio económico integrado para toda América. En general pude afirmarse que en
el período 1994-1999, la política exterior venezolana estuvo centrada en temas
económicos.
La política Exterior de Venezuela luego de 1999
En 1998,
la victoria de Hugo Chávez Frías en las elecciones, marcará el inicio de un
nuevo período en la evolución de la política exterior venezolana. Tras la
promulgación de la Constitución de 1999, el gobierno Nacional ha intentado
llevar adelante una nueva política hacia el resto del mundo, cuyos objetivos
centrales se encuentran establecidos en la propia Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela. Entre esos objetivos se cuentan:
- Estimular la democratización de la sociedad internacional, con el fin de alentar la acción concertada de los países en desarrollo, al igual que la solidaridad y la cooperación entre los distintos actores del sistema internacional.
- Promover la integración latinoamericana y caribeña, para afrontar con mayor empuje las desigualdades sociales y los profundos niveles de pobreza que afectan a los países de la región.
- Consolidar y diversificar las relaciones internacionales, robusteciendo la cooperación Sur - Sur y ampliando las relaciones con otras regiones y países.
- Fortalecer el posicionamiento de Venezuela en la economía internacional.
Al mismo tiempo, la participación de Venezuela en mecanismos de
cooperación tendientes a la articulación de esfuerzos entre los países menos
desarrollados como el Grupo de Río, el Movimiento de Países No Alineados, el
Grupo de los 77 y el Grupo de los 15, ha dado un gran impulso a fin de
conseguir las metas de la política exterior venezolana.
La política Exterior del actual gobierno ha sido tremendamente activa y
en ocasiones, no libre de polémicas; en el afán por ayudar a la concreción de
un orden económico Multipolar, se han sostenido reuniones y tratados con
gobiernos de los cinco continentes, destacando el establecimiento de fuertes
vínculos políticos y comerciales con los miembros de la OPEP, además de países
como China , Brasil
, Cuba y Argentina
; de forma paradójica, a medida que las relaciones comerciales con los Estados
Unidos han ido en aumento, ha crecido también el enfrentamiento político entre
los gobiernos de Washington y Caracas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario